El cine es mito y es realidad, es la posibilidad de imaginar y aportar con el principio de un mundo mejor o peor. Todo principio surge en la conciencia.

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Ante la mentirosa y tendenciosa desinformación de los mass media, es necesaria una contra-información, es importante generar historias que vayan más allá de mostrar las miserias humanas, y más allá  del sistema económico centrado en el capital, la tecnológica, y mucho más allá del egoísmo; es imprescindible contar historias en las cuales se desarrollen procesos de madurez y desarrollo de la inteligencia social, política, humana, emotiva; historias suscritas a procesos de crecimiento espiritual, emprender la construcción de un mundo mejor,  más igual e equitativo, más sensible  con el prójimo y la naturaleza, más comprometido con un futuro de paz y  justicia entre todos los seres humanos. Un contrapeso efectivo a la concentración y consecuente poder de  los  medios  de  comunicación, solo lo puede dar una Industria del  Cine y  la Televisión del Buen Vivir. El cine es mito y realidad, es la necesidad de imaginar y empezar a construir  un mundo mejor en la conciencia de los espectadores

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